Los acordes de las guitarras y los remates de las baterías aún resuenan a
poco más de un kilómetro de la sede de voleibol de playa de los Juegos
Olímpicos de Londres 2012, pues ahí en el número 165 de Oxford Street
estuvo una vez el Marquee Club, semillero de bandas como los Rolling
Stones y Pink Floyd.
Harold Pendleton, contador de profesión y entonces Secretario de la
Federación Nacional de Jazz de Gran Bretaña, mezcló su habilidad con los
números y su pasión por la música para construir un hogar que albergó a
los grupos emergentes de jazz y rythm&blues en Londres a finales de
los 50 y principios de los 60, así como a los exponentes de la
psicodelia, el rock progresivo, el soul, el folk y el heavy metal en las
décadas posteriores.
El Marquee arrebató sus primeros aplausos del público joven y
extrovertido de la capital inglesa en abril de 1958 en el sótano del
Academy Cinema enclavado en el barrio de Soho, corazón de la escena
musical de la ciudad en aquella época. Pendleton rescató de la ruina al
antiguo salón de baile del recinto, cuyas noches de jazz agonizaban al
igual que las cuentas bancarias de los antiguos arrendatarios.
Sin cambios en la decoración del salón de baile, estilo circo con rayas
rojas y blancas, el Marquee se convirtió en uno de los clubes más
concurridos por la juventud de Londres bajo la tutela de Pendleton y su
amigo jazzista Chris Barber, quienes dieron entrada a personajes como
Alexis Korner y Cyril Davies, considerados los padres del R&B
británico junto a su banda Blues Incorporated.
El Marquee Club es “la casa de la buena música, donde nacen las
tendencias y emergen las estrellas”, publicó en su momento la revista
“Melody Maker”. Mick Jagger, Keith Richards y sus colegas le dieron la
razón al redactor cuando debutaron bajo el nombre de Rolling Stones en
enero de 1963, un año antes de que el club se mudara al espacio donde
vivió su etapa dorada.
Los días de Oxford Street fueron sólo el prólogo de lo que estaba por
venir y la notificación de desalojamiento que entregó el dueño del
Academy Cinema a Pendleton dio pie a los mejores años del club. El
primer Marquee se despidió con la presentación de los Yardbirds, entre
quienes figuraba como guitarrista Eric Clapton. Tras la clausura, se
abrió un nuevo capítulo para el club no muy lejos en el número 90 de
Wardour Street, hoy ocupado por un restaurante de comida mediterránea.
El cambio de sede llegó acompañado de la camada de músicos más talentosa
que puso pie en el escenario rojo y blanco del Marquee; The Who, David
Bowie, Pink Floyd, The New Yardbirds (Led Zeppelin), King Krimson, Yes y
el nombrado mejor guitarrista de la historia por la revista Rolling
Stones, Jimi Hendrix, desfilaron por el club en la segunda mitad de los
60.
"El Marquee era el club musical arquetípico. Los camerinos eran
diminutos, impregnados de sudor y del fantástico aroma de la colonia
barata hombres, y en una noche de éxito tenían el ambiente típico de una
fiesta de estudiantes en un ascensor", escribió Nick Mason baterista de
Pink Floyd sobre el club que llegó a albergar hasta 1000 personas en
sus noches estelares, cuando el cupo oficial era de 700.
El inicio de los años 70 trajo consigo la licencia para vender alcohol y
el Marquee abrió el bar por primera vez, además los colores de la
decoración pasaron de rojo y blanco a negro con el logo del club en
amarillo. La transformación dio paso a nuevos músicos, entre los que
destacan Elton John, Supertramp, ACDC, The Police, The Cure, Iron Maiden
y Sex Pistols.
El Marquee de Wardour permaneció de pie hasta 1988 cuando el desgaste
generado por las vibraciones de los instrumentos durante sus 24 años de
vida le pasaron factura y las autoridades de Londres obligaron a cerrar y
demoler el lugar por seguridad, enterrando uno de los capítulos más
dulces de la historia del rock.
Las versiones posteriores que intentaron revivir al Marquee nunca
duraron más de cuatro meses, tras la partida de Pendleton, quien
decidió abandonar la dirección del club a la par del cierre en Wardour
Street. Sin embargo, el trabajo ya estaba hecho y el legado dejado
sobrevivió al paso del tiempo y hoy se puede ver materializado en el
Festival de Rock de Reading, que al igual que los Stones, The Who, Pink
Floyd y compañía, nació en la escena del Marquee Club.
0 Responses So Far:
Publicar un comentario